Aquí os presento un parecido razonable muy curioso entre una de mis canciones preferidas de
L'amor feliç, el último discazo de Mishima, y un cántico que escuché el otro día en el partido de Champions del Bayern contra el Madrid. Escuchad el final de
No obeir (a partir del minuto 3:00) y a estos hinchas alemanes, a ver qué os parece.
No hay comentarios:
Publicar un comentario